Para esta familia la alfarería es una forma de vida que se ha pasado de generación en generación.
Ellos te abren la puerta de su casa-taller Don Juan te cuenta que práctica desde niño con el barro y luego de más de 40 años está recién aprendiendo. En el taller ubicando en el barrio de La Convención, aquí se hacen piezas de barro únicas que luego son fundidas a miles de grados para obtener un singular acabado negro.